Ayer estaba pensando que mi biblioteca no es tan grande como yo quisiera. Dentro de todo me gusta harto leer y no siempre tengo tiempo ni plata para hacerlo. Hace unas semanas me dejaron un libro en custodia que se llama Un Día Perfecto del autor Sebastián Edwards.
A decir verdad nunca había oído ni leído nada de él.
En fin, la cosa es que mi amigo me dijo que estaba bien entretenido el libro y que se lo cuidara mientras iba al concierto de Accept (al cual tristemente no pude ir) y que se lo devolviera al día siguiente. Así que, como me metió el bichito de la curiosidad lo leí en tiempo record. Me pasé 4 horas ininterrumpidamente leyéndolo y debo decir que era bueno. Además tiene la letra grande xD.
No sé si debiera dar una sinopsis completa de la historia del libro puesto que es nuevo, pero una pasadita si podemos hacer para que se entusiasmen.
La historia comienza el 10 de junio de 1982, día en que se juega el partido Chile vs. Unión Soviética. Aparentemente es un día perfecto...
Esteban se encuentra en la casa de Ofelia tratando de instalar una repisa mientras escucha el partido por la radio. Ofelia ha enviado a los niños a Viña y José Manuel, su marido, está en el estadio viendo el partido in situ.
Esteban y Ofelia se conocen hace un buen tiempo, comienzan a rememorar viejos tiempos mientras poco a poco se descubre que Esteban sigue enamorado de Ofelia a pesar de los años.
A la misma hora se describen las historias de José Manuel (el marido de Ofelia) Juan Domech (reportero del Reuters) que espera entrevistar a Leo Horn (el árbitro) y de Lev Yashin, arquero de la Unión Soviética.
Es entretenido como paulatinamente se mezclan todas las historias puesto que el libro está relatado al estilo 24 (¿vieron esa serie? ¿la de Jack Bauer?) entonces podemos estar viendo todos los puntos de vista de cada personaje casi al mismo tiempo.
Al final que esta novela tiene romance, historias de guerra, espías y un final inesperado.
Me gustó.
Le doy mis 20 estrellas de barro y una recomendación para quienes leen este humilde blog.
Ahí se huelen!